Existen quienes nunca se arriesgarían a tener una cita a ciegas, sobre todo porque puede ser un poco peligroso, pero quienes se aventuran pueden pasar un gran momento, o al menos tener un recuerdo gracioso o una historia para contar cuando se está con las amistades. Sin embargo, hay quienes van buscando una relación, y en esos casos hay ciertas cosas que ayudan mucho a tener éxito.
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Pasos para triunfar en la cita a ciegas
Antes de empezar se ha de realizar una aclaración, cada uno de los pasos y consejos que aquí se colocan pueden ser subjetivos, es decir, el hecho de que se vean en esta lista, no significa que la personalidad va a cambiar completamente, sino que estos deben ser ajustados a la personalidad propia, y hacer que encajen dentro de la forma de ser de cada persona.
De hecho, no hay una peor manera de salir de una cita a ciegas, o de una cita en general, que tratar de aparentar algo que no se es solo para impresionar, ya que de hacer esto no solo se suele perder el interés de la otra persona, sino que también se pierde un poco la integridad personal, al no demostrar seguridad.
Las citas a ciega son mejores sin expectativas ni información
Quizás se sepa un poco acerca de la persona, y eso está bien. Lo que no está bien, es comenzar a investigarle por las redes sociales, o incluso interrogar a sus conocidos acerca de su forma de ser. Ya que esto puede confundir y crear expectativas muy confusas, las cuales tienen a ser rotas.
Además, las personas con ese tipo de necesitad suelen ser consideradas como “acosadores”, sin importar si se trata de un hombre o una mujer. Esa desesperación por saber de quién se trata demuestra una falta de amor propio y de confianza en las habilidades personales.
Ir dispuesto a “todo”
Esta expresión no es literal, sin embargo, es necesario ser receptivo y estar abierto a nuevas posibilidades durante la cita, ya que en ese preciso momento puede surgir la chispa del amor, por ende, lo mejor es no cerrar la mente, y estar dispuesto a probar ciertas cosas nuevas, siempre y cuando estas sean legales y no causen ningún daño.
Saludo cordial
Si no se sabe cómo realizar un saludo en una cita a ciegas, lo mejor es ofrecer una sonrisa, y dar uno o dos besos, ya que eso demuestra amabilidad y cariño, lo que inmediatamente elimina la incomodidad de la primera cita, o incluso de la primera vez que dos personas se ven en persona.
Claro que dichos besos no han de ser exagerados, sino como si se estuviese saludando a una antigua amistad que se tiene tiempo sin ver.
Aplicar las normas de cortesía básicas
A algunos se les olvidan las normas de cortesía, y es que resulta muy incómodo que una persona interrumpa a otra en medio de un relato. Al mismo tiempo, no es necesario que la conversación sea un interrogatorio, en el cual solo una persona pregunta, y la otra responde diligentemente.
La conversación debe ser fluida, siempre prestando atención a lo que dice la otra persona, viendo siempre a la parte alta de la nariz para simular contacto visual, y no a cualquier otra parte del cuerpo. Es necesario recordar que la mirada dice, mucho, por lo que una mirada incomoda y directa a los ojos, puede incluso espantar a la persona.
Tener la postura correcta
Inconscientemente el cuerpo envía una serie de mensajes son su postura, por lo que no importa lo relajados que se vean los ojos, o lo suave que suene la voz, si el cuerpo se ve tenso, entonces se transmite esa misma sensación a la otra persona.
Lo ideal en una cita a ciegas es ir relajado, sin necesidad de salir corriendo por algo del trabajo, sin crear expectativas falsas, simplemente ir con la mentalidad e pasar un rato agradable. De esta forma el cuerpo se prepara y se relaja, por lo que se mantiene una postura adecuada durante la cita.
Ser puntual
Por último, y aunque pareciera un poco redundante de recordar, es necesario ser puntual, lo que no significa llegar a las 8 si la cita es a las 8, sino tener un cierto adelanto de 15 minutos para esperar a la otra persona, lo que no solo demuestra interés, sino también compromiso y respeto.
Al mismo tiempo, si por alguna razón se llega tarde, la razón debe ser concisa, rápida de explicar, y estar acompañada de algún detalle. Además de aceptar el hecho de que la otra persona puede estar un poco molesta por la impuntualidad, lo que sería normal, así que durante el resto de la cita, se ha de colocar la mejor sonrisa, y no quitársela.
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